Los mexicanos vivimos y morimos por la comida. Cuando combinas este culto con una metrópolis tan cosmopolita y frenética como la Ciudad de México, con una población mayor a 20 millones de habitantes, obtienes una combinación interesante de opciones y sabores de alimentos. La dieta mexicana se basa en el maíz, en vez del arroz de los países occidentales o el trigo de los europeos. Le juramos lealtad a la dieta de las tres T: tacos, tortas y tamales. Los tacos rellenos de una variedad de proteínas, las tortas en bolillo (un pan parecido al baguette) y los tamales hechos de una masa almidonada de maíz. Simplemente imagina la ciudad a las 2 p.m., ¡cuando todos están comiendo!
7:40 a.m. – Un día normal para mí comienza a las 7:40 a.m., tengo una hora para arreglarme y salir de casa. Nunca salgo sin haber tenido un desayuno saludable. Suele incluir fruta y ya sea quesadillas o huevos. Me gustan las quesadillas (tortilla de maíz o harina doblada a la mitad) con queso Oaxaca derretido y jamón; o unos huevos rancheros. Los huevos rancheros consisten en un huevo estrellado sobre una tortilla frita y bañados con una salsa verde picante. Tardo de 30 a 40 minutos en llegar a mi trabajo o mi primera cita. Hoy hay una gran manifestación sobre el Paseo de la Reforma, una de las avenidas principales de la ciudad, por lo que el tráfico está excesivamente pesado. He estado en el coche durante 45 minutos y aún no he logrado llegar a la oficina, esto es una locura…
9:30 a.m. – Desde el momento en que entro a mi oficina, llamo a la cafetería y pido un café de olla, un café mexicano tradicional servido en una taza de barro que suele disfrutarse en las mañanas frías. Este café tiene un sabor distintivo gracias a la combinación de canela y piloncillo (azúcar de caña integral sin refinar). Durante las primeras horas de la mañana, reviso todos los correos que no he leído y resuelvo cualquier asunto urgente. Constantemente consulto medios de comunicación para asegurar entrevistas o publicar artículos que hablan sobre mis clientes. Hoy intento coordinar un viaje de prensa para la siguiente semana en Ixtapa-Zihuatanejo, un bien conocido destino de playa en México. Realmente espero tener la oportunidad de ir a ese viaje para disfrutar algunos de los impresionantes platillos de pescados y mariscos que encuentras en Ixtapa, como el pescado a la talla (un delicioso pescado a la parrilla con salsa de chile), ¡además de que necesito vacaciones!
12:00 p.m. – A media mañana tomo un descanso y salgo por un tentempié. Después de haber vivido en varias ciudades alrededor del mundo durante los últimos años, realmente extrañaba las botanas mexicanas que esta ciudad ofrece. Suelo comprar papas fritas caseras con Valentina (una salsa de chile) que venden en la calle. Una justa advertencia para los extranjeros: cuidado con este tipo de botanas, pueden llegar a ser extremadamente picantes. Si estoy de un humor más saludable, compro un poco de jícama que suele comerse como botana con jugo de limón.
12:15 p.m. – Regreso a mi escritorio para darle seguimiento a algunos contactos de los medios, rezando que confirmen su participación en el viaje de la próxima semana. También logro elaborar la agenda para mi reunión semanal de relaciones públicas con uno de mis clientes. ¡Espero no olvidar todos los pendientes que necesito comentar, siempre me recuerdo que debería escribir un Post-It para hacerme la vida más fácil!
2:00 p.m.- Salgo lista para disfrutar la comida con mis amigos. Tal vez algunos dirán “¡espera, 2:00 p.m. es demasiado tarde para la comida!”; bueno, los mexicanos comemos bastante tarde y solemos tomar un descanso de dos horas. Los viernes, como hoy, me reúno con amigas que trabajan cerca. Nos ponemos al día, probamos un restaurante nuevo (para que yo escriba una reseña en mi blog de comida) y comenzamos a planear nuestro fin de semana. Hoy decidimos probar Azul, un restaurante mexicano en la Colonia Condesa del reconocido Chef Ricardo Zurita. Comenzamos bebiendo un poco de mezcal y de comida pedí los chiles en nogada, el platillo de temporada para esta época del año en la que celebramos la Independencia de México. Este platillo consiste de chiles poblanos rellenos con una combinación de carne, fruta y especies bañados de una salsa de crema con nueces, llamada nogada. Una de mis amigas los prefiere con salsa de mole. Hoy tenemos la boda de una amiga, por lo que platicamos sobre los vestidos que usaremos y cómo nos peinaremos. Todavía no puedo decidir cuál vestido usar, espero que mis hermanas me ayuden a decidir más tarde…
4:00 p.m. – Llego al Hotel Four Seasons de la Ciudad de México (uno de mis clientes principales) para una sesión de fotos. Esta vez es con una revista de comida que quiere escribir un artículo sobre Pan Dulce, la nueva pastelería del hotel. Mientras el fotógrafo toma las fotos, respondo los correos electrónicos urgentes antes de que comience el fin de semana. Ya que no pedí postre en el restaurante, pido una concha, un pan dulce típico mexicano en forma de concha que encima tiene una costra de azúcar con vainilla.
6:00 p.m. – ¡Termina la sesión fotográfica y el fin de semana ha comenzado! Tengo dos horas para prepararme para la boda. No estoy segura de cómo voy a estar lista en tan poco tiempo. Entro a mi coche y rezo pidiendo que el tráfico se haya tranquilizado y así logre llegar pronto a mi casa. Prendo el radio y me río de las tonterías que está diciendo el conductor del programa. Los mexicanos en general pasamos tanto tiempo en el tráfico, que las estaciones de radio necesitan hablar de temas divertidos para que el tiempo sea más agradable. Mientras estoy atorada en el tráfico, veo a varias personas en medio de la calle vendiendo obleas (hojas delgadas de azúcar) y gorditas de nata (pan dulce tipo bollo inglés).
8:00 p.m. – Llego a la ceremonia de boda justo a tiempo para ver a Daniela caminar por el pasillo. Es una de mis mejores amigas de la universidad, por lo que he estado escuchando acerca de esta boda desde que se comprometió hace algunos meses. Seguida por la fiesta, donde hay 700 invitados, por lo que podrán imaginar el tamaño del salón, es absolutamente hermoso. Todo el salón está lleno de flores blancas y muebles plateados; cuando yo me case así quiero que se vea. La cena incluye una sopa de tortilla con un filete de pescado en salsa de tomate y aceitunas verdes. Después de la cena disfruto el tiempo con mis amigos bebiendo cuantiosos shots de tequila durante varias horas.
6:00 a.m. – Para cuando veo mi reloj ya son las 6:00 a.m. y están sirviendo chilaquiles verdes. Los chilaquiles son un famoso platillo de desayuno con trozos de tortilla fritos bañados en salsa verde o roja, queso y crema ácida, ¡deliciosos! Es el platillo perfecto para curar la terrible resaca que probablemente tendré al despertar. Sé que probablemente pasaré todo el día sintiéndome cansada, pero como decimos: “lo bailado nadie te lo quita”.
Este artículo fue originalmente publicado en Now Magazine, un proyecto de la comunidad de PepsiCo para creativos de vanguardia a lo largo de 15 de las ciudades más emocionantes del mundo. Para conocer más acerca del proyecto, visita: https://thesensenetwork.com/